Rubén Espinosa Becerril nació en Ciudad de México, pero llevaba ocho años trabajando en Veracruz como fotoperiodista. El pasado día uno de agosto su cadáver fue encontrado junto al de otras cuatro personas en la colonia de Narvate, Dristito Federal, después de que su familia lo declarase desaparecido durante 24 horas. El asesinato de Espinosa era prácticamente una muerte anunciada. El reportero había huido de Veracruz ante las amenazas que había sufrido anteriormente, temiendo correr la misma suerte que 12 de sus compañeros, todos asesinados bajo el gobierno de Javier Duarte Ochoa. 

Con Espinosa, las cifra de periodistas asesinados se eleva a 88 en México, pero este crimen marca un antes y un después. Distrito Federal era considerado el último refugio de los reporteros que se veían forzados a desplazarse al no poder ejercer su oficio con garantías, pero el reciente homicidio demuestra que ya no se trata de un lugar seguro. Además hay que añadir el hecho de que el fotógrafo conocía el riesgo que sufría, sin embargo las autoridades no hicieron nada por protegerlo, tanto en Veracruz como en la capital mexicana.

el país más peligroso en américa
La Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) ha calificado a México como el país más peligroso en el que ejercer el periodismo durante más de una década. Veracruz cuenta entre los cinco estados con mayor número de agresiones a periodistas, incluyendo desapariciones, exilios, amenazas, agresiones físicas o como anteriormente se ha mencionado, asesinatos.
Periodistas como Rubén Espinosa o Regina Martínez, asesinada en el 2012 y homenajeada por Espinosa un día antes de su desaparición, se convierten en testigos incómodos para los gobiernos locales o el crimen organizado y es entonces cuando ven su vida amenazada. La violencia contra los periodistas crece cada día en México, las cifras aumentan y la impunidad es total frente a los crímenes. Pero frente a la falta de interés estatal la solidaridad de varias organizaciones ha movilizado este domingo a reporteros y ciudadanos a pedir justicia para Rubén y detener, de una vez por todas, el recuento de asesinatos.

#Justiciapararubén